Takeya Matsumoto, chef y dueño del reconocido (siempre lleno) restaurante Kura, quería hacer algo que no fuera estrictamente japonés y de allí resultó NÂM, un lugar único en su tipo en la Ciudad de México que se especializa en distintos tipos de curry.
La mezcla de ingredientes y el diseño de los distintos currys que se sirven en NÂM vienen directo de la imaginación de Matsumoto. Él llegó hace 12 años a México para trabajar en el restaurante Murasaki del grupo Estoril, después pasó al Tori Tori, inició el Mog y logró abrir su propio restaurante, el Izakaya Kura. Recientemente también inauguró el Koku (con sede en la Condesa y en la Cuauhtémoc), el Maikai Poke, el Kitsune Ramen y ahora el flamante NÂM. Es decir, Matsumoto es la corona detrás de algunos de los lugares más ricos para comer japonés.
Takeya abrió el NÂM básicamente porque extraña el curry y en la Ciudad de México no hay mucho lugares donde comerlo. En tamil, “curry” significa salsa y es la palabra occidental para designar platillos elaborados a base de una mezcla de especias más o menos picantes. El platillo predomina en las cocinas del este y el sureste asiático y adopta toques diferentes en cada lugar. Hay decenas de tipos de curry dependiendo su lugar de origen. En NÂM, el curry es japonés.
El curry japonés lleva una salsa es espesa color café oscuro. No es muy picante, ni las especias son tan fuertes. Además, el caldo se hace a base de puras verduras y especias, o sea es completamente vegetariano.
NÂM significa “cinco” en vietnamita, como 5 son los picos de la estrella en la bandera de Vietnam.
Los currys estrella en el NÂM
La estrella de NÂM, según Takeya Matsumoto, es el curry gyudon (el más japonés de todos) que lleva guisado de res y cebollín. Otro curry exquisito es el tonkatsu, que viene con cerdo empanizado, salsa tártara y cilantro. También hay green curry tipo tailandés, que se hace a base de leche de coco.
Todo se puede pedir sin proteína animal, pero el jitomate curry es totalmente vegano, ligero, fresco y cremoso. Para los niños hay un curry nada picante que viene con papas con caritas felices : )
Recomendaciones extras
Para abrir paladar recomendamos la Ensalada cattage (arúgula baby, queso cattage, nuez y nori); las porciones no son muy grandes porque el curry es muy llenador. Para refrescar la boca mientras que uno come el curry espeso e hirviendo recomendamos pedir algún encurtido para picar de cuando en cuando. El más solicitado es el kimchi (preparación fermentada de diferentes vegetales que lleva como ingrediente principal la col china o baechu). Todos los currys incluyen la cantidad de arroz blanco con cebolla frita crujiente que quieras, excepto el ramen curri, y tú eliges la intensidad en el picante.El restaurante
También las bebidas son deliciosas. Hay tres cocteles muy frescos hechos a base de ron que le van bien a los sabores fuertes del curry. Pero además hay calpis, sake y varias cervezas nacionales y japonesas. En las noches se vuelve aún más interesante. Como es oscuro se tiñe de rojo iluminado por el neón que dice NÂM. La música es muy importante. Los encargados tienen un exquisito gusto en su selección.
También importante, el NÂM está en una de las zonas más bonitas de la Condesa, muy cerca del Parque México, y tiene un par de mesas afuera en las que se puede fumar.
La idea es que NÂM se replique en más lugares de la ciudad, tiene servicio a domicilio vía Rappi y Uber Eats.
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