Los capitalinos deshechamos, en promedio, 62.61 toneladas de vidrio al año y de todo eso tan sólo se recicla el 12%, lo que convierte al vidrio en “el gran olvidado” del reciclaje. La principal causa de esto es el bajo costo que ofrecen los recicladores por este material, cuyo valor por kilo es de sólo 10 centavos. 

Por suerte existen diferentes formas de darle una segunda vida a las botellas y frascos que desechamos. Gracias a asociaciones como Cerrando el Ciclo, una asociación civil con sede en Ciudad Neza, podemos procesar estos deshechos y darles un nuevo uso. Además, ellxs están ayudando y capacitando a mujeres en situación vulnerable a que se conviertan en emprendedoras del reciclaje.

Así inició Cerrando el Ciclo

Cerrando el Ciclo nació en 2014 gracias al apoyo de Grupo Modelo, quienes necesitaban un análisis de los residuos generados en sus actividades industriales para convertirlos en materiales productivos. El resultado de esa investigación fue la elaboración de diferentes productos como bolsas, mochilas, joyería y artículos decorativos hechos completamente con materiales reciclados como cámaras de llanta, lonas de anuncios espectaculares, aluminio y por supuesto, botellas de vidrio.

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Aún con estos resultados, muchas empresas y la misma sociedad consideran que los beneficios obtenidos al reutilizar sus deshechos son muy pocos y por eso deciden ignorar materiales tan nobles como el vidrio. Afortunadamente, donde los demás vieron una desventaja, en Cerrando el Ciclo vieron una oportunidad y comenzaron su proyecto que, además de beneficiar al medio ambiente, también tiene un propósito social.

Emprendedoras del reciclaje 

Si bien el vidrio como residuo muy tiene poco, o casi nada, de valor, en Cerrando el Ciclo creen que, en las manos correctas, una botella de cerveza o de vino puede convertirse, literalmente, en una joya. Su programa de Emprendedoras del reciclaje capacita especialmente a madres solteras para construir adornos y joyería a partir de las botellas que las personas tiran.

La idea, además de que que puedan crear su propia fuente de ingresos, es que compartan sus conocimientos con su comunidad y generen una red comunitaria de recicladores. Por otro lado, la asociación también ofrece talleres y capacitación para todas las personas interesadas en los procesos para el reciclaje de botellas de vidrio. 

Acopio de botellas

Quienes llevan tiempo reciclando en casa, seguro ya saben que muchos recolectores no se llevan el vidrio porque “no lo pagan”. Para solucionar ese problema, Cerrando el Ciclo tiene un programa de recolección de vidrio donde se alían con empresas ambientalmente responsables e iniciar campañas de reciclaje con sus empleados. Así ellos pueden llevar las botellas que tienen en casa o las que encuentran en la calle y canjearlas por productos de la canasta básica, promocionales de la empresa o productos de Cerrando el ciclo.

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Si se los pides, también pueden ir a recoger tus botellas hasta tu casa, lo único que tienes que hacer es llenar este formulario y cubrir una cuota de recuperación, la cual incluye un regalo elaborado con vidrio reciclado de un valor similar.

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