Si ahora el Centro Histórico puede ser un lío, hace 30 años era caos y abandono. Por mucho tiempo hubo edificios al borde de desaparecer, estaba poco alumbrado y había inseguridad. Dicen que tenía el encanto que le daban los habitantes que llevaban años allí, pero definitivamente era otra cosa. Hace poco más de una década, el paisaje comenzó a transformarse, inició la remodelación del Centro Histórico. Rescataron fachadas descompuestas, iluminaron las calles, abrieron centros culturales; llegaron nuevos negocios (y, naturalmente, cerraron otros). Eso sucedió sobre todo en el primer cuadrante y luego poco a poco en otras zonas.
Es el turno de tres calles detrás de Palacio Nacional: Licenciado Verdad, Moneda y República de Guatemala que muy pronto se convertirá en un corredor peatonal que nos emociona bastante.
Paseo cultural
El proyecto unirá Licenciado Verdad con República de Guatemala –cuyo acceso estuvo clausurado mucho tiempo– y del otro lado con Moneda. Será todo libre de autos. Así se reactivará un Circuito Cultural del Centro Histórico, que recorre toda la parte de atrás de Palacio Nacional.
Licenciado Verdad es la calle más pequeña del Centro Histórico. Ahí estuvo la primera imprenta, en la Iglesia más chueca, que hoy es un espacio dedicado al arte contemporáneo. Justo al frente, en los edificios 11 y 12, se desarrolló la escena artística de los 80 y 90: un grupo de artistas exiliados en México allí vivieron, montaron sus estudios, trabajaron, realizaron exposiciones, fiestas y hasta abrieron un restaurante clandestino para solventar sus gastos.
Esta caminata también incluye el Antiguo Palacio del Arzobispado/ Museo de Hacienda (donde están las piezas con que los artistas pagan impuestos), Palacio Nacional, Antigua Casa de Moneda/Museo Nacional de las Culturas, Palacio de la Autonomía y desde luego el Templo Mayor, el Centro Cultural España y el Museo Archivo de la Fotografía.
Si todo sale bien, este nuevo paseo será sin duda uno de nuestros favoritos del Centro Histórico. Las obras comenzaron a principios de este mes y se espera que terminen en noviembre. Si esto resulta bien –la iluminación, rehabilitación de algunos edificios y fachadas, y seguridad– en diciembre podremos disfrutar de ese diminuto pero hermoso paseo.
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