El sur es territorio que a los que viven más al centro les gusta llamar desconocido. Por regla general, los sureños detestan las horas de transporte perdidas para alcanzar a los que creemos que la ciudad y sus opciones se limitan a la Delegación Cuauhtémoc (ahora alcaldía). Con todo, en las calles tranquilas de sus barrios pasan cosas como Galatea Panadería Bistro, un pequeñísimo restaurante que los vecinos consideran una suerte de estación espacial. Alejada, diminuta y en la que pasa de todo.
Galatea cumplió dos años en octubre y en sus mesas nunca faltan comensales. Los locales los adoran pues son un pequeño oasis. El menú es breve, y de su giro ellos mismos anotan: “nos gusta visitar clásicos de distintas cocinas; a veces nos ponemos creativos”. Los dos socios –Alexei y Arturo– vivieron varios años en Japón y Francia, respectivamente. Así que en los desayunos encuentras por igual un omelette japonés sazonado con dashi o unos huevos con gratín dauphinois.
La panadería y la repostería llegan de Bakers, el otro proyecto del que Arturo es socio; una panadería artesanal en la colonia Roma. Luego está toda la barra de café con detalles bonitos como el Galatea (leche con cardamomo, piloncillo y naranja) o el Atenea (maíz tostado y piloncillo).
Hay Lassi hecho en casa con cardamomo o fruta y blends de la mexicana OHA, un proyecto que Arturo conoció en una feria de gastronomía. Como ese, varios productores van sumando a la oferta de cosas locales: miel de un señor de Michoacán, huevos orgánicos de una señora en Amecameca, carnes frías de la empacadora de Coyoacán La Selva Negra…
En Galatea, estación espacial, pasan cosas todo el día. El menú que preparan cambia cada semana y lleva tres tiempos. Una semana el primer plato puede ser una burrata con jitomate y germinados, y de plato fuerte un robalo cítrico con pimientos. O risotto negro con pulpo y jitomates deshidratados. Para los que buscan algo más informal hay sándwiches, como el de estofado y queso azul, por ejemplo. Cuesta $240, aunque también puedes elegir pedir sólo uno de los tiempos, que publican en sus redes sociales.
Ceviche del menú de la semana
Para tomar están los vinos de mesa, sencillos y nada pretensiosos. Refrescos Búho, mexicanos con cafeína natural y casi menos del 60% de azúcar o cervezas Colima.
Para un vino, un desayuno muy especial o una comida con personalidad, Galatea está en Coyoacán. En una callecita apacible, sin mayor adorno, con comida honesta diseñada por dos sureños hartos de atravesar la ciudad. Y que decidieron fundar su propio centro de todo, en porciones pequeñas y excelentes.
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