San Gregorio Atlapulco está bien al sur de la ciudad: 40 kilómetros desde el Centro Histórico, para ser exactos. El pueblo pertenece a la delegación de Xochimilco y sus chinampas son las que llenan de productos los puestos de la Central de Abastos. Antes del 19s, muchos chinamperos tenían además acuerdos de venta con restaurantes o escuelas; después del terremoto, entre otras (muchas) calamidades, también perdieron eso.

Hace poco visitamos las chinampas de San Gregorio para conocer a los agricultores del paraje La Espejera. Después de todos los daños que dejó el 19s, tuvieron que diseñar muchas maneras diferentes para sobreponerse a la crisis. Crearon por ejemplo Pachoa, una iniciativa que organiza tours guiados y la zona chinampera; también Chinampa Auténtica, un servicio de venta de canastas con los productos que cosechan en las chinampas.

chinampas

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Casandra forma parte del grupo de agricultores de las chinampas y nos acompañó durante la visita. “Unos meses antes del sismo tuvimos una gran inundación” me cuenta mientras caminamos entre las chinampas verdes de lechuga y verdolaga de San Gregorio, “después del temblor fue todavía peor: perdimos muchas chinampas, se hundieron otras, había agua por todas partes; era un caos total”.

Además de los destrozos a las casas y calles del pueblo, lo peor fueron los daños al comercio. Después del 19s los canales de comunicación de la ciudad cayeron, el transporte colapsó y muchas calles tuvieron problemas de circulación; en San Gregorio fue diez veces peor. Ahí el transporté tardó mucho en restablecerse y durante meses no había manera de entrar o salir del pueblo, ni para las personas ni para los productos agrícolas de cuya venta dependen.

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En otras zonas más céntricas de la mancha urbana la movilización fue más ágil, a 40 kilómetros al sur, la ayuda llegó a cuentagotas. Los chinamperos dicen que apenas ahora, dos años después, sienten que comienzan a recuperarse. El proceso ha sido duro, pero una de las consecuencias más esperanzadoras son las iniciativas que surgieron después del 19s para diversificar los ingresos.

Proyecto Chinampa Auténtica

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Los señores Juan y Agustín forman parte del grupo de 8 chinamperos de La Espejera. Mientras recorremos los canales bordeados de ahuejotes me cuentan los problemas que todavía enfrentan las chinampas: el gobierno les da semillas pero son de muy mala calidad y tienen que invertir en comprar mejores; después del sismo perdieron muchos compradores y a veces tienen que tirar producto que no se vende. De esa necesidad de venta nació Chinampa Auténtica.

chinampas 19s

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Chinampa Auténtica es un servicio de venta de los productos de esas chinampas. Comprarlos no sólo lleva la garantía de consumir algo local y sin pesticidas, sino también de apoyar la supervivencia de una agricultura tan antigua como la ciudad misma. La chinampería está olvidada porque estorba al plan de desarrollo de las ciudades; la idea de progreso nunca incluye al campo, tan vinculado a un atraso del que las grandes urbes quieren alejarse.

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Para Juan, Agustín, Casandra y todo el grupo de chinamperos lo más importante para continuar reconstruyendo después del 19s es que más gente los conozca, sepa lo que hacen con tanto esfuerzo y compren sus productos.

Cómo comprar

Para comprar las canastas y conocer los productos de temporada uno puede escribir un mensaje a la página de Facebook de Chinampa Auténtica o directamente a Don Agustín al 55 2888 8442. Ahorita, por ejemplo, hay verdolaga, lechuga, espinaca, calabaza, rábanos, cilantros y chiles, entre otras cosas, y a veces incluso flores (hace poco había dalias).

Ya pasaron dos años del 19s, y aquí estamos reconstruyendo partes pequeñas y grandes de esta ciudad. No olvidemos que a 40 kilómetros vive una comunidad entera de agricultores urbanos en la resistencia, produciendo alimentos buenos a través de redes locales. La mejor forma de apoyar la chinampería es entenderla como parte importante de la ciudad, que a pesar de todo su concreto todavía tiene algo de campo. No dejemos que se pierda.