Todo empezó con el nacimiento de dos niñas. Hace 4 años, Loli Bros sintió que algo le faltaba a la ciudad. Como mamá nueva empezó a percibir que la etapa del recién nacido estaba propositivamente descubierta en el mercado capitalino. Ella ya diseñaba ropa pero para niños más grandes y sin una identidad muy definida; con esta nueva inspiración desarrolló una nueva identidad de marca que empató con su preferencia por los algodones peinados. En 2014 lanzó Animales Salvajes, la primer colección de Veo Veo para bebés y toddlers de 0 a 3 años. Desde entonces fue encontrando en este nicho a su mejor público.
Veo Veo se caracteriza por prendas muy cómodas de tela de punto, suave y casi esponjosa al tacto. Al tocarlas decididamente uno piensa en un bebé y no en un niño de 6 años en una resbaladilla. El algodón peinado es justamente eso, un hilo que pasa por más procesos de peinado que el algodón cardado simple (únicamente estirado y torsionado). Este segundo peinado le quita impurezas y fibras quebradizas al hilo, por eso lo hace más resistente, ordenado y la superficie de la tela termina siendo más tersa y homogénea.
Su última colección se llama Xolo y se inspira en el xoloescuincle mexicano. Xolo toma el papel protagónico que tuvieron los perros el 19S y le da una vuelta amigable al insuceso. Loli y su esposo Leandro crearon un personaje ilustrado divertido, un xolo super héroe que en su momento, literal, ayudó a recaudar fondos en Japón para las víctimas del sismo por medio de la venta de baberos con su imagen. Las ilustraciones son autoría de Leandro y tienen un airecito punk que contrasta pero llena de ingenio la delicadeza de prendas que alcanzan el tamaño de una mano adulta extendida. Los diseños son urbanos, hay leggings miniatura con parches impares en las rodillas, varios vestiditos o pijamitas en color negro y episodios citadinos del xolo que vive activamente las calles en patineta.
Lo más difícil para Bros fue posicionarse como una marca no clásica, no de estilo bebé español que lleva voladitos, no de vestido pastel, no de ropa o para niña o para niño: lo más difícil fue el negro. Muchas mamás todavía se resisten, una prenda Veo Veo no es un regalo que haría una abuela. Tiene que llegar la tía “moderna” buscando algo diferente para el baby shower y dar con un vestidito negro Veo Veo o el vestidito negro salir a encontrarse con una mamá más arriesgada que la tradicional, por eso la marca es éxito en tiendas de diseño no exclusivo para niños como Happening, Taxonomía y Cañamiel. Pero esta dificultad hace a la marca y la ha posicionado con éxito en toda la ciudad y el mundo exterior. Veo Veo está en Laguito, Orion Kids, Babies & More (una nueva tienda especializada en bebés que tiene 1,000 metros cuadrados de superficie) y también en línea. Además están abriendo mercados fuera, como Chile y China donde sus productos se están colocando como pan caliente.
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