En San Francisco, California, entre el 2005 y el 2006 empezaron los espacios de coworking y la idea se ha ido replicando en todo el mundo. Como una respuesta, o quizá como una consecuencia inevitable de los tiempos, nacen estas iniciativas con la idea de combinar el individualismo del freelancing con la comunidad que sólo genera una oficina.

Los coworkings llegaron a México hace cuatro años (sobre todo a la Ciudad de México y a Guadalajara) como un reflejo de del mundo laboral actual y lo que busca la gente joven cuyo despacho es portátil. Cada vez hay más freelancers y start ups: para todos ellos trabajar en casa es correr el peligro de la procrastinación, que todos conocemos, y al mismo tiempo correr el peligro de estar demasiado solo; trabajar en un café, que sería la segunda opción, no es viable por muchas horas y no siempre es cómodo y/o suficientemente privado. Aquí entran los coworkings, espacios laborales donde uno no está demasiado solo y tiene todo lo que requiere para concentrarse.

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Centraal

Dentro de este entusiasmo gringo al más puro estilo Sillicon Valley, el coworking tiene su propio argot y sus propias expresiones, que aunque estén en inglés, México las ha tomado y en algunos casos abusado. En uno de estos espacios uno escucha por doquier palabras como freelance y start up y otras como meet up, networking o, la más usada –pues todos lo son–: pet friendly.

Visitamos 4 espacios de coworking muy distintos entre sí para darnos una idea:

1. Público

Público abrió hace tres años y tiene cuatro sucursales: dos en Polanco, una en la Condesa y una en la San Miguel Chapultepec, que es la que visitamos. Está ubicado en un edificio de seis pisos con una fachada de celosía blanca y óvalos de concreto para dar la perspectiva de tridimensionalidad. Todos los muebles, desde los escritorios personales hasta las oficinas, fueron diseñados por los mismos arquitectos y hay terrazas, balcones, espacios para tomar fotos de estudio, organizar conferencias, etc.

 

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En los pasillos del edificio conviven principalmente fotógrafos, arquitectos, diseñadores, publicistas y artistas que intercambian sus talentos y el espacio se convierte en un mundo creativo donde nacen nuevas ideas y proyectos. La interacción que el diseño del lugar genera, crea networking y comunidad entre los que trabajan allí.

Público también tiene un comedor donde el chef Pablo Salas prepara comida casera estilo fonda, bastante buena.

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2. Centraal

Centraal abrió hace un año y está ubicado en una casa en Zamora, en la Condesa. Este coworking está destinado más que nada a start ups de innovación tecnológica. Su alianza con Google los convierte en el único Tech hub partner en México. Juntos organizan eventos y meet ups tecnológicos para apoyar a empresas que están empezando y generarles el impulso necesario.

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Las instalaciones, decoradas de forma elegante con muebles de diseño, son cálidas e inspiran un ambiente de concentración y productividad. Este espacio de coworking fomenta las relaciones de trabajo que pueden nacer ahí al calor de los cocteles, las sesiones creativas y las reuniones y talleres. En estos eventos el objetivo es que las personas se inspiren entre sí y presenten sus proyectos.

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3. The Pool

The Pool tiene espacios de trabajo en Polanco y en la Juárez, nosotros vistamos el de avenida Toledo, que lleva abierto siete meses. Sus tres sucursales están estratégicamente ubicadas cerca de zonas restauranteras, centros comerciales, parques y transporte público. Ellos tienen una incubadora y aceleradora de negocios que apoya a emprendedores mexicanos jóvenes a comenzar su negocio.

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Sus espacios son juveniles e incitan a la interacción: hay un futbolito y una terraza con mesas de picnic en la que hacen eventos recreativos. También ofrecen talleres no exclusivos para sus clientes y cada cierto tiempo tienen noches de networking solamente para mujeres.

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4. CoLabora

CoLabora se identifica como un coworking boutique. Mientras la mayoría de los coworkings tiene capacidad para alrededor de 200 personas, ellos para 36. CoLabora busca ser mucho más hospitalario y ofrecer un servicio completamente personalizado.

Sobre Zacatecas 98, Roma Norte, está la segunda sucursal de este grupo. Es en el segundo piso de una casa antigua pintada de blanco y con ventanas grandes. Los espacios, decorados de forma limpia y minimalista, inspiran la creatividad de los que trabajan ahí.

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En CoLabora desarrollan e impulsan ideas con el apoyo de Grupo CyC, un fondo de capital que fomenta el talento mexicano. Éste grupo les brinda asesorías financieras, legales y de marketing a quienes propongan un proyecto innovador. CoLabora es un espacio en el cual todos se conocen y forman parte de una comunidad de trabajo.

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CoLabora

Todos estos espacios de coworking son en esencia lo mismo: sitios frescos para fomentar la productividad de personas con proyectos independientes, sitios que salvan a muchos de la soledad (que es un signo de los tiempos) e impulsan las ideas creativas. Sin embargo, sí hay diferenciadores entre uno y otro (tanto en temperaturas, magnitud o precios), y si estás buscando unirte a alguno te recomendamos hacer un sondeo de varias antes de elegir con cuál te quedas. Lo ideal es que en un futuro exista un espacio de estos para cada colonia o barrio que lo requiera.