Lo que comenzó como un proyecto chiquito en la Facultad de Ingeniería de la UNAM se ha convertido en una startup crucial para los mexicanos. Hector Ortiz, junto con otros dos estudiantes, fundó Rennueva, una startup que recientemente abrió el primer centro de acopio de unicel en la Ciudad de México. Ortiz desarrolló un método para reciclar poliestireno expandido y busca encontrar nuevos usos para reutilizar el plástico.
Prácticamente todos los restaurantes o fondas usan bandejas de unicel para empacar los alimentos; cientos de productos de supermercado están envueltos en esto; vasos y platos se utilizan en las fiestas, y las famosas “perlas” de unicel se emplean en el relleno que protege los embalajes. Es decir, estamos rodeados y nadie se salva de utilizarlo de vez en cuando porque, obviamente, es de lo más práctico… sobre todo porque no pesa nada. Pero el unicel –nos lo han dicho hasta el cansancio– contamina enormemente. En pocas palabras, por lo siguiente:
1. Está hecho de petróleo, que es un recurso no renovable.
2. Su producción genera contaminación pesada y acelera el cambio climático
3. En contacto con alimentos, el unicel puede “migrar” algunos de sus componentes tóxicos y cancerígenos a la comida.
4. En caso de no reciclarse constituye un peligro para las aves y los animales marinos que lo ingieren al confundirlo con comida.
Producimos tantas toneladas de éste plástico (125 mil cada año, aproximadamente) que hasta hace poco era virtualmente imposible reciclarlo. Y los problemas que enfrenta Rennueva tienen mucho que ver con la cultura. “No somos conscientes de lo que cuesta nuestro estilo de vida. No somos conscientes del costo que tiene la naturaleza para que podamos usar zapatos o platos desechables”, señala Ortiz para El País. “Lo seguimos haciendo porque no queremos cambiar nuestro estilo de vida”.
Así, la cultura de los habitantes de la ciudad es el principal reto para que una empresa como Rennueva haga la diferencia. Pero somos pioneros en el método de reciclaje y es precisamente startups como éste lo que –con suerte– nos harán concientizar acerca de nuestro estilo de vida y dejar de usar unicel sólo porque es más cómodo. El acopio comenzará a recolectar unicel a partir de diciembre para reducir así el volumen de residuos que generamos los capitalinos en las fiestas decembrinas.
Para reciclar cualquier tipo de unicel, puedes llevarlo allí.