En octubre y noviembre, los mercados de la CDMX se llenan de papel picado, veladoras, disfraces y frutas de temporada, siendo la calabaza de castilla una de las protagonistas. Te decimos cómo aprovecharla con este sencillo tutorial para hacer dulce de calabaza en casa.

La calabaza de castilla se caracteriza por su piel gruesa, pulpa carnosa y muchas pepitas en su interior; puede ser verde, con manchas blancas o totalmente naranja. Su uso es milenario: de acuerdo con el Arqueólogo Enrique Vela, existe evidencia de que esta especie creció en Ocampo, Tamaulipas, y Tehuacán, Puebla, desde hace aproximadamente 7,000 años. Posteriormente esta calabaza fue llevada a Europa donde comenzó su producción –le gustó tanto a la reina Isabel de Castilla que por ello se le dio su nombre.

Durante la época de la Colonia se dice que se cocinaba en las calderas en las que se fabricaba el piloncillo. Para ello se combinaban dos calderas colocadas sobre un gran horno; una de estas calderas se conocía como “mancuerna” y la otra como “tacha”, era en la segunda donde se combinaba la calabaza con la melaza y de ahí su nombre de “calabaza en tacha”.

Ingredientes:

4 trozos medianos de calabaza de castilla (aprox. ½ kg)Agua suficiente para cubrir las calabazas en una cacerola
Piloncillo al gusto (usamos 2 conos para esta cantidad)Canela en raja, (3 piezas)
½ kg de guayabas½ kg de tejocotes

Instrucciones:

1 – Después de lavar todas las frutas, cortamos la calabaza en trozos grandes. No tires nada de las semillas; a las guayabas sólo hay que cortarles los extremos.

2 – Los tejocotes se hierven en una olla y se retiran del fuego una vez que veas que la cáscara se infla. Déjalos enfriar un poco, y quítales la cáscara.

3 – En una olla colocamos el agua, la canela y el piloncillo. Deja que hierva y revuélvelo hasta que se integren los ingredientes y el piloncillo se disuelva. Agrega la calabaza en trozos. Cuando la calabaza se haya cocido un poco (aproximadamente 20 minutos), incorporamos los tejocotes y las guayabas.

5 – Tapamos la olla y a fuego lento dejamos que todo termine de cocerse. Esto tarda entre 20 – 30 minutos más.

6 – Sabrás que está lista cuando la calabaza esté suave pero sin deshacerse. Puedes servir y acompañar con leche fría.

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