Siempre relegada a la sombra del taco, su popular primo de maíz, la torta es igual de versátil, tanto así que lo mismo que se puede poner en una tortilla lo que se puede introducir en una telera. Eso sí, ofrece una mayor resistencia a los jugos gracias a la miga y su costra crujiente por lo que la variedad de rellenos aumenta.
Jamón, pollo, pastor, suadero, carnitas, tamal, rajas, aguacate, plátano o sopa de fideo –sin preguntas–, lo que pienses es posible. De los ingeniosos nombres ni hablar.
Como ocurre también con los tacos, existen lugares de probada calidad: loncherías y puestos lamineros que a base de sudor y embarradas de mayonesa se han hecho de golosos reconocimientos. Estos locales forman parte de ellos:
1. El encanto de Lola
Olvida todo lo que sabes de tortas. Deja atrás la de jamón con chorizo, la Suiza o la Trevi y prepara tu mente y paladar para un pionero en las “tortas de autor”.
Obviamente, el encanto de Lola son sus tortas, que no son las clásicas. Aquí se mantiene el pan, la telera pues, pero atiborrado con ingeniosas combinaciones de ingredientes; está la de porchetta con arúgula, la de camarón vietnamita –con coco, pepino, zanahoria y mayonesa de Sriracha–, la vegetariana –de mozzarella, alcachofa y pesto– o bien, la Croque Monsieur que no le pide nada a ese que ordenas en el brunch.
Para bajar el bocado está el clásico acompañamiento: refrescos bien fríos. Eso sí, para exponenciar la experiencia lo mejor es pedir una malteada de Gansito que puede ir “con piquete” o sin él.
¿Dónde? Amargura #14, colonia San Ángel (justo enfrente de la Plaza San Jacinto).
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2. El Cuadrilátero
Fundado por el mítico luchador Super Astro hace más de 20 años, El Cuadrilátero ofrece las combinaciones básicas de tortas, junto con las especialidades creadas por los torteros, en cuatro diferentes tamaños para satisfacer a todos: desde el menos hambriento hasta el imponente luchador de más de cien kilos de peso que entrenó durante horas.
La especialidad de la casa es la Gladiador, una torta de más de 35 centímetros de largo y 1.5 kilogramos de peso; una enorme telera –horneada exclusivamente para El Cuadrilátero– rellena de salchicha, jamón, bistec, pollo, chorizo, jitomate, cebolla y aguacate. Ideal para familias grandes o para comer durante toda la semana.
Si tienes el arrojo de una figura de la lucha libre puedes entrarle al reto de la casa: enfrentarse a semejante energúmeno y acabar con el en menos de 15 minutos. Si lo logras tu cuenta es gratis y tu nombre figurará en la brevísima lista de vencedores. Eso sí, los gastos médicos corren por tu cuenta.
¿Dónde? Luis Moya #43, colonia Centro (a media cuadra de la XEW).
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3. Tortas Armando’s
Cuenta la leyenda que a finales del siglo XIX, don Armando Martínez inventó las tortas tal y como las conocemos ahora. Ahora, 127 años después, el legado de este hombre –cuyo nombre debería estar escrito con letras de oro en el Congreso de la Unión–, perdura en nuestros corazones y, en el caso de algunos, de sus arterias.
En la calle de Humboldt, entre avenida Juárez y Paseo de la Reforma, Tortas Armando’s ofrece una selección de tortas sacadas del Manual Básico de Torteros: jamón y quesillo, tres quesos, queso de puerco o huevo. Sin embargo, la estrella es la de milanesa, una torta portentosa que le dio renombre a don Armando y su estirpe.
¿Dónde? Humboldt #24, colonia Centro. A una cuadra del metro Hidalgo (saliendo por Real Cinema).
4. La Barraca Valenciana
Si don Armando Martínez creó las tortas, el chef José Miguel García las redefinió con increíbles combinaciones de ingredientes que, por si fuera poco, son servidas con una muy generosa porción de aguacate.
Los nombres de las tortas, y sus rellenos, hablan por sí solas. La Gallega de bacalao, la Blanc y negre de longaniza blanca y morcilla o la Vegetariana de berenjena y queso. Sin embargo, las roba suspiros de este lugar son la Valenciana con jamón serrano, chorizo y queso que impregnan el pan con su grasa y sabor para lograr una torta perfecta: llenadora y ligera; la otra es la Girona, una telera cargada de lomo, tocino y queso que te deja con una sensación cremosa en la boca y una pregunta en la mente: ¿Me puedo acabar otra?
Las tortas nunca fueron tan elegantes.
¿Dónde? Avenida Centenario #91, colonia Coyoacán, y en Querétaro #225, colonia Roma (en el Mercado Roma).
* ¡Y ponle aguacate!
Las Súper Tortas en Puente de Alvarado, a unas cuadras de Guerrero, son buenas, sabrosas y baratas; El rey del pavo en el Centro, con su tradición de más de 100 años; Las Robles y La Texcocana con la sencillez tan a la mano de la Alameda o las laureadas El Capricho en Augusto Rodin, en la Insurgentes Mixcoac, también son muy buenas.
¿Qué decir de las de lechón de la Fonda 99.99 en la Del Valle? ¿Y las de flautas de Las Salseadas en la Roma? En fin, ¿cuál faltó?