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Sentimos una irresistible atracción hacia lo miniatura. Para los niños las cosas a pequeña escala son una suerte de inclusión a los roles del mundo de los adultos. Pero la fascinación de los adultos por lo diminuto, lo miniatura, tiene más que ver con el fetiche, con la idea de poder tomar entre las manos conceptos que de otra manera los rebasan y, desde luego, con la réplica. Toda miniatura es una réplica de su modelo gigante. Y eso es lo irresistible.
Hace casi medio siglo nació La Miniatura en un local de la calle Niños Héroes, en la Doctores. Su fundador, el señor Julián Ramírez, decidió transformar la manera de hacer pan, o mejor dicho, decidió encoger la manera de hacer pan, y así fue como se convirtió en el primer micro-repostero de la Ciudad de México. Después de los panes llegaron los minipasteles –réplicas de los tradicionales de boda, quince años, día de las madres– que pronto se volvieron la estrella del lugar.
Reproducir cualquier cosa en pequeño supone atención especial y mucha paciencia (parte indisociable de su encanto). Actualmente, con tres sucursales –la matriz en la Doctores y 3 más en la Roma, el Centro Histórico y Tabacalera–, en La Miniatura producen todos los días de 80 a 100 diminutos, perfectos pasteles al día, más la producción diaria de pan dulce. Y todos, todos sus pasteles se acaban.
Los hay desde los 5 hasta los 25 centímetros de diámetro y pueden ser hasta de 4 pisos. Tienen aproximadamente 50 diseños, sobre todo para boda y XV años, con fantasía y brillos y colores, pero también de distintos sabores: de cajeta y fresas hasta oreo o tres leches (con licor), siempre con su pan esponjoso igual al de un pastel normal. E incluso uno puede mandar a hacer su propio diseño.
La cocina es industrial por su gran producción y materia prima, pero es un santuario al detalle. La repostera lleva 20 años decorando los pasteles con una prolijidad impecable. Y ver cómo los hace es un placer, igual que comerse uno (aunque nos parezca triste deshacerlos) pues no sólo son tiernos, también son ricos.
Esta pastelería ha seducido con sus miniaturas a niños y adultos por casi medio siglo, y por eso le deseamos larga vida. Mientras tanto, la diminuta y extraña fascinación por lo microcósmico seguirá sin resolverse.
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Horario: Lunes a viernes de 7 a 21:30, sábado hasta las 21, domingo de 8 a 22
Sitio web: laminiatura.com.mx
Teléfono: 5588 2772
Dirección: Niños Héroes 64, Doctores
Sucursal: Independencia 101, Centro
T. (Centro): 5521 8913
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