Así como uno nunca lee el mismo libro dos veces (porque cambiamos constantemente), uno nunca ve cine de la misma manera dos veces: cada que vemos una película la experiencia es distinta. Hay cine de todos los géneros y para todos los gustos, cine que es mero entretenimiento y el que se queda en la cabeza por días o por siempre. Pero sobre todo, la experiencia siempre es distinta porque una película es un encuentro con un pedazo de tiempo: es distinto estar solos o acompañados; en casa, en un avión o en el cine; en una crisis amorosa o en la (siempre efímera) sensación de plenitud. Ver una película es un acontecimiento que contempla escenarios –internos y externos– distintos.
La Semana Fénix llegó hace dos años a la ciudad como un espacio para vivir el cine iberoamericano del momento de distintas maneras –y maneras muy especiales: durante 10 días uno podrá escoger entre ver estas películas bajo las estrellas, con chocolate caliente en la mano, o en salas repletas en las que uno apenas conoce el título de lo que verá; ya sea hacer la reseña con un amigo o con los realizadores de la película.
La Semana Fénix es una serie de proyecciones, conversaciones, talleres, clases magistrales y encuentros de profesionales alrededor de los Premios Fénix, que buscan acercar a más personas al mejor cine de Latinoamérica, España y Portugal.
“Un monstruo vino a verme”, película nominada a los Premios Fénix 2017.
Esta edición será del 1 al 10 de diciembre. De nuevo sus organizadores Cinema23 y MICA de IMCINE se lucieron con el programa de actividades abierto al público que incluye la proyección de Tempestad –preseleccionada a los Oscares– y Neruda en el Teatro Ángela Peralta; la multipremier de las películas nominadas a los Premios Fénix 21017, donde el público elegirá cuál ver de entre las ocho nominadas; la exhibición de La región salvaje de Amat Escalante; una charla con Christopher Nelson; la exhibición de Japón –que este año entra al Criterion Collection– acompañada de una charla con Carlos Reygadas y Abraham Cruzvillegas y la lectura pública del guión de Abel por Diego Luna.
Las actividades del programa son totalmente gratuitas, pero es muy importante hacer un registro previo para poder asistir. Lo único que deberás hacer es ingresar a este enlace y llenar el formulario de registro. También es necesario llegar con tiempo a los eventos –entre 40 minutos y una hora antes– pues el cupo es vasto pero limitado.
La ceremonia de los premios se podrá ver en live streaming en la página oficial de Fénix.
Durante estos 10 días también se estarán proyectando las películas nominadas y algunas que quedaron en preselección en las cuatro sedes aliadas a Fénix: Cinépolis, Cine Tonalá, Cineteca y Ecocinema –salas de cine móviles que funcionan con energía solar y se montarán en zonas periféricas de la ciudad. Ahí mismo, antes del 6 de diciembre, el día que serán los premios, los asistentes podrán formar parte de jurado votando.
La ceremonia de los Premios Fénix 2017 se transmitirá en vivo por premiosfenix.com, sopitas.com y msn.com.
Además de pasarla bien, la Semana Fénix es una gran oportunidad para acercarnos al cine y salvar de su propia extinción al cine de nuestro país y de los países con que compartimos una lengua (y con el cine, un lenguaje más).
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