Monte Tláloc: el templo más alto del mundo en el Estado de México
El templo más alto del mundo está en México. Está, de hecho, a una hora de la Ciudad de México: el Monte Tláloc, a 4,120 metros sobre el nivel del mar.
El templo más alto del mundo está en México. Está, de hecho, a una hora de la Ciudad de México: el Monte Tláloc, a 4,120 metros sobre el nivel del mar.
Los relojes públicos comenzaron a ser olvidados, pasaron de ser un elemento útil a un símbolo anticuado pero los que aún quedan forman parte del paisaje citadino y aunque ya no sean esenciales, son elementos únicos de la ciudad.
Cuatro espacios para olvidarse, aunque sea por un momento del caos de la ciudad y solo escuchar piezas sonoras, música clásica o poesía.
En la calle homónima, Parque Lira está para visitarse un día cualquiera y perderse (poquito) entre plantas, juegos, skaters y gatos.
Sadi Carnot es una calle afortunada y llena de historia. En las cuatro cuadras quedan edificios y residencias que recuerdan el antiguo esplendor de la colonia.
El Museo de Cartografía es esa especie de templo o iglesia que todos hemos visto desde el periférico y que se encuentra entre rejas. Es un lugar fascinante que ahora está a cargo del ejército y tiene cientos de mapas antiguos de la ciudad.
Ciudad de México en el Tiempo es una de las cosas más relevantes que le han sucedido a la memoria de la ciudad. En esta página vive un archivo de más de 80 mil postales de la ciudad. El generoso proyecto existe gracias a los cronistas Carlos Villasana y Rodrigo Hidalgo.
En José Martí está este mini local donde "el Conejito" venda la mejor calidad de sombreros, pero también repara, achica o agranda tu sombrero. Visítenlo.
Los sabores que ofrece la Xóchitl son betabel, nuez, cacahuate, piñón, mamey, apio, jitomate, beso de novia (fresas con crema) y el clásico blanco. Esta pulquería abrió en 1907. Es un espacio con historia donde los revolucionarios tomaban pulque dentro y fuera del local.
La luz selecciona lugares especiales donde quedarse y los vuelve espacios que la gente busca y a veces se vuelve difícil encontrar. Te recomendamos 5 puntos donde la entrada de luz se vuelve parte misma del lugar y motivo para ir corriendo a buscar un espacio y disfrutar de esas partes visibles de la ciudad.
Este lugar le da la bienvenida a la tercera edad. Constituye una excepción del paisaje citadino que festeja, por una vez, no un antídoto contra la vejez. El Pabellón Coreano es un rincón que invierte los papeles del saber occidental. Aquí, ser mayor de 60 es gozar de un privilegio y ser menor, toda una incomodidad.
Entre los sesenta y ochenta México vio erguirse una serie de edificios brutalistas, que hoy en día siguen siendo una afortunada sorpresa urbana que le pone pausa a lo cotidiano.
Fue en épocas de la revolución cuando soldados en busca de tesoros perdidos u olvidados encontraron cuerpos momificados en San Ángel.
Avenida 20 de noviembre está llena de mujeres pintadas en las puertas metálicas de las tiendas y locales y sólo se ven cuando cierran.
Aprovechando que en las vacaciones y puentes la ciudad tiende a vaciarse un poco, el aire a mejorar y el tráfico a bajar, te recomendamos 5 paseos bajo la sombra.
Recomendamos estos 11 lugares que elegimos con cuidado para proponer una experiencia de encantamiento con la colonia Tabacalera y aledañas.
Desde Insurgentes se puede ver esta ballena rota y desaliñada en el Parque San Simón, prima de el pez más triste de la ciudad que vive el parque bicentenario.
Con el crecimiento de la ciudad, este monumento quedó ahogado en el cruce de Insurgentes, Vallejo y Circuito. Queda invisible, inaccesible para el peatón.
Recorrimos la Tabacalera guiados por James Oles, historiador del arte.
Vive un encuentro cultural con uno de los barrios emblemáticos de la Ciudad de México: San Ángel, hogar de artistas míticos como Diego Rivera.