Una estrella de anís da vueltas entre el hielo y la ginebra. Pétalos rojos —de lo más rojo que existe— flotan en un vaso frío del coctel donde todo se diluye. La música suena también: es el saxofón y contrabajo que dirige Fausto Palma desde el segundo piso de esta vieja casona de la Roma. Las Noches de verano, se celebrarán cada jueves.
No cabe duda que los habitantes de esta capital lluviosa e inundada tenemos recursos para cada temporada. Casa Virginia es una de las mejores propuestas que hemos encontrado: doble altura, paredes forradas de madera blanca y una gastronomía que no tiene comparación.
En las noches de verano hay delicias como:
Mini quesadillas de frijol con lechón
Mini tostadas de guacamole
Mini tostadas de atún
Mini tostadas de cordero (que saben a cochinita pibil)
Gazpacho de jitomate
Un coctel agridulce hecho con Ancho Reyes (licor de chile ancho) y agua tónica. Una toronja adorna la bebida y suelta el sabor de cítrico
Otro coctel es el mezcal Montelobos con pepino y limón. Muy refrescante
Un semi amargo gin Hendricks con flor de anís y pétalos de rosa rojos
Casa Virginia abrió en el 2013, cuando la señora Virginia, nieta de don Antonio Revuelta —el propietario original de toda la casa, incluyendo Delirio— enviudó y rentó el resto de la propiedad a la chef Mónica Patiño. Estas especiales noches delirantes estarán también en otro de los restaurantes de Patiño: La Taberna del León.
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