Expendio Durango es la tienda de abarrotes de Contramar, una de las cocinas más queridas de la Roma y un sobreviviente también. Esto explica un poco por qué los productos que ofrece están tan bien seleccionados. Y más que competir con lo que uno ya compra en el mercado o supermercado, lo complementa; es un extra de la despensa.
Grupo Contramar (del Contramar, Entremar y los extintos Barracuda y Cibeles) creó Expendio con la idea de vender los productos que ya hacían en sus restaurantes y que de tan bien que les salen, había que compartir. El pan y los postres, principalmente (que son, sin lugar a dudas, de los más ricos de la ciudad). Para armar una miscelánea consistente, agregaron otros artículos que tienen sentido con su filosofía de la cocina, los que ellos mismos usan. Son productos frescos, honestos, nunca demasiado caros. De hecho, hace poco se unieron a Baluarte, una iniciativa de Slow Food México, que consiste en una selección de proyectos que apoyan producciones de calidad y en peligro de extinción. Por lo tanto, dentro de poco tiempo introducirán productos muy particulares de esta lista.
La idea es que Expendio se replique en otras colonias. Y ya andan en esas. Por ahora están en Rappi y tienen servicio a domicilio –hasta donde llega su bicicleta–.
Lo siguiente que compartimos es una selección de lo que llena sus estantes:
El pan y los postres
De lo más rico de Expendio es el pan, y es el mismo que sirven en el centro de mesa de todos los restaurantes del grupo. Hace 15 años eran otros tiempos, y encontrar buen pan hecho con masa madre era muy difícil. Aún cuando en su menú no hay platillos con pan, en Contramar querían ofrecer uno que les convenciera. Entonces comenzaron a indagar en el tema de la masa madre y a producir su propio pan (que después usaron también en Cibeles y Barracuda). En Expendio cualquiera puede llevar sus distintos tipos de pan, salado y dulce, a casa. Pero lo mejor mejor de todo es que sus postres, unos de los más codiciados de la ciudad entera, también los venden en piezas individuales o sobre pedido, que tienen listo de un día para otro (y cuesta $580 pesos). Nadie debería pasar sin Contramar o Expendio sin probar su merengue o pay de plátano.
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Comida preparada
La comida preparada que ofrecen es sencilla. Desde el principio pretendieron que fuera honesta, y que tuviera que ver con los productos que ya hacían. Como tenían un pan muy rico, pues armaron unas tortas muy ricas. Con las tortas quedaban las ensaladas, que preparan con hortalizas y vegetales de Yolcan –que, a propósito, tiene su punto de entregas en Expendio–. Más que orgánica, la comida prepara de aquí es es comida bien hecha, práctica y rica.
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Abarrotes
Los huevos que venden en Expendio son de rancho. Conocen quién los hace, dónde y cómo, y cuestan $60 pesos. La mantequilla es de verdad; el aceite de oliva de Tamaulipas y las mieles son de tres geografías y flores distintas, todas deliciosas: miel mantequilla del Tsisilche, de flor de naranjo y las mieles de temporada de Son de Miel. Tienen salsas picantes, pomodoro y pesto que ellos mismos hacen y salsas de otros productores mexicanos; entre ellas el chicharrón de chile (que en Local nos da obsesión). Todo estos “extra de la despensa” son productos que resurtimos medio constantemente y por los que vale la pena gastar un poquito más.
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Bebidas
En sus anaqueles tienen vinos, cervezas, mezcal, sotol, un ginebra mexicano y muy pronto pox. Un poco de todo, pues tienen bien claro que, contrario a una tienda de ultramarinos, aquí las bebidas son un complemento. Tienen algunos vinos orgánicos, otros naturales, a buen precio; vinos como para el diario. La mayoría franceses y mexicanos. También está la Colimita edición especial por los 20 años de Contramar, y un par de etiquetas de mezcal y otros destilados.
También tienen bebidas sin alcohol: café de Passmar, que uno puede pedir para llevar o en grano; aguas frescas del día, kombuchas y más bebidas que hacen bien.
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