entrecot
9 de junio 2018
Por: Lucia OMR

L’Entrecôte: la reconfortante opción de un menú de un sólo platillo

L’Entrecôte, en Polanco, sirve un sólo platillo pero está tan bien hecho que no necesita más. Y aunque lleva en México ya más de 3 años, queremos hacerle un mínimo homenaje.

Hay días en la vida en que uno no quiere elegir un platillo de un menú, ni un coctel, ni siquiera quiera ver las opciones. Son días en que la verdadera serenidad viene de sentarse en un lugar cómodo, sin pretensiones, y saber exactamente qué esperar. Para eso existe L’Entrecôte, que sirve un sólo platillo pero está tan bien hecho que no necesita más. Y aunque lleva en México ya más de 3 años, queremos hacerle un mínimo homenaje.

Cuando cenas allí, no hay menú. Sólo le dices a la mesera qué termino te gusta en la carne y si quieres el vino de la casa –un vino francés de mesa, ligero, que ellos mismos producen– o algún otro que tengan en la carta.

 

El menú es el siguiente:

Para empezar te sirven una tablita de quesos franceses, fuertes, y una canasta con mantequilla y pan. Luego una ensalada verde que tiene vinagreta de mostaza y nueces y, luego, las mejores papas a la francesa de la ciudad servidas con entrecote (un corte de lomo de res) y una salsa de receta secreta, memorable. También te sirven segundos si quieres, y lo más probable es que sí.

Le Relais de Venise L’Entrecôte empezó en París en 1959, específicamente en Porte Maillot, con la idea de ser un lugar elegante, sencillo y bien llevado. Las mesas debían llevar un mantel de papel sobre los manteles de tela para apuntar el término de la carne de cada quién, y la decoración debía ser cálida, con paneles de madera, espejos y carteles vintage. Hoy hay L’Entrecôte en Londres, Nueva York y la Ciudad de México, y las cosas siguen exactamente igual. Estuvo tan bien planeado en su momento que nunca se ha necesitado modificar ni agregar más.

 

L’Entrecôte de la Ciudad de México tiene vista al parque Lincoln y resalta del resto de los restaurantes que están a su lado por su sencillez y elegancia, por su calidez. A L’Entrecôte uno va sabiendo qué esperar y eso es más que suficiente. El resultado es delicioso.

.

[snippet id=”33138″]

.

También en Local: 

La mejor comida francesa en la ciudad

Exit mobile version