Quien conoce a un sinaloense sabe que ellos necesitan (casi por obligación) buenos mariscos. Y si no los encuentran, lo traen. Marcos y Adriel –ambos de Sinaloa–, cansados de no encontrar mariscos como en casa, abrir su propio lugar en la ciudad. Un cachito de Sinaloa que les recordara a casa. Así, por mera nostalgia y como necesidad, crearon el concepto de Avenida la Tizona.
En este restaurante, los mariscos llegan tres veces por semana desde Culiacán, así que uno puede estar seguro de encontrar productos de Sinaloa con recetas y conceptos hechos por gente del mismo lugar.
Pulpo cocinado al grill, marinado especial de la casa, toque de jugo ed limón, sal de mar, acompañado de arroz rojo.
El menú es amplio y diverso: hay botanas como chips de papa con pulpo marinado o paté de marlin, platillos más tradicionales como taco Gobernador y la especialidad de la casa ––platillos que fusionan los sabores de Sinaloa y Ciudad de México. Uno de los tacos favoritos de ese menú es el taco Rola, la tostada negrita y el aguachile Juanito, preparado con tres salsas diferentes: roja, negra y verde con distintos niveles de picante.
Trío de aguachiles de camarón con salsa verde, negra y roja, acompañado de pepino fresco y cebolla morada.
Todos estos también fueron nuestros favoritos, pero la verdadera especialidad y motor de Avenida la Tizona son los mariscos de carreta. “Cuando empezamos el negocio mi socio y yo nos dimos un viaje por Mochis para ver qué elementos queríamos traer y dimos con que nosotros queríamos ofrecer marisco de carreta: producto a buen precio, fresco, preparado al momento y de buena calidad. El que todos extrañamos”, dice Marcos Gaxiola, uno de los fundadores de Avenida la Tizona.
En Los Mochis es común ver carretas de mariscos en cada esquina. De los mejores lugares para comer mariscos es allí, en la calle, y Marcos y Adriel lo ofrecen tal cual: mariscos sin pretensión y a precio justo.
Atún fresco en cubitos marinado con salsa oriental de la casa, aderezo spicy en la base, coronada con cebolla caramelizada y serrano fresco.
El nombre La Tizona lo sacaron de una calle de Mazatlán en donde se juntaban a cocinar, comer y tomar; un punto de reunión semanal. Lo mismo buscan hacer del restaurante que abrió en marzo de este año: un punto de encuentro importante para los amigos y familias donde además comas delicioso.
El ambiente no es nada pretencioso y es algo que los dueños tienen claro. No buscan ser el restaurante de alguien si no un restaurante casual y para todos. Los jueves tienen promoción de 2×1 en cerveza nacional, los viernes 2×1 en coctelería y los sábados tienen la promoción favorita de la casa: un mezcal y una cerveza por $85.
En Mazatlán, la Tizona es una avenida, acá en la ciudad Avenida la Tizona es el pedazo de Sinaloa que todos los capitalinos necesitábamos, aún sin saberlo.
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