autocinema coyote
14 de febrero 2019
Por: Andrea Cinta

Autocinema Coyote, para ver películas clásicas desde tu auto

El autocinema Coyote cumple con todos los requisitos de un drive in: un lote baldío para muchos automóviles y una gran pantalla para ver películas clásicas.

Aunque suene a cliché de los cincuenta, el sueño común de tener una cita romántica y darse unos besos pasionales en el coche, mientras una película transcurre en el fondo puede materializarse en nuestra ciudad. El autocinema Coyote cumple con todos los requisitos de un drive in tradicional: un lote baldío enorme en donde se forman decenas de automóviles en fila frente a una gran pantalla para ver películas clásicasy en donde te puedes comer una hamburguesa con una malteada mientras disfrutas del filme.

Algunas personas de mi generación todavía recuerdan el autocinema Satélite que estaba por Mundo E, que sobrevivió hasta 1991 y fue el último de los autocinemas en cerrar sus puertas. Pero para los millenials que nunca vivieron esa experiencia, en el 2011 surgió Coyote para ofrecerles la posibilidad de vivir un autocinema con ambiente retro cincuentero: la tipografía de los anuncios de neón, la selección de alimentos en el menú, el tipo de música que ponen antes y después de la película, y el hecho de que exista un intermedio, apuntan a un intento por sugerir o reproducir una experiencia fílmica de antaño.

El autocinema Coyote tiene más de cinco años de vida y lleva cambiándose de locación varias veces. Hoy en día está ubicado dentro de la burbuja de Slim City, casi frente a Plaza Carso y muy cerca del Museo Soumaya. El autocinema está rodeado de enormes y lujosos edificios recién construidos, dándole un aire contemporáneo a una experiencia cincuentera. Además, unos minutos antes del crepúsculo, se prenden las lucecitas de las oficinas y los departamentos circundantes, y se encienden los neones y la pantalla del autocinema ofreciendo un concierto luminoso memorable.

Habría que decir que las películas que se exhiben allí no son de estreno; más bien son clásicas o algunas de no hace tanto. La calidad de la proyección es excelente y la banda sonora es impecable, pues te sintonizas a una estación de radio y escuchas perfectamente los sonidos y los diálogos de la película dentro de tu propio vehículo. Aunque el lote tiene capacidad para 80 autos, la entrada y salida de coches está bien organizada y evitas el inconveniente de pasar demasiado tiempo en colas innecesarias.

En el autocinema Coyote uno tiene lo mejor de dos mundos: del público y del privado. Dentro del coche uno puede reír, llorar y gritar sin el riesgo de que alguien lo calle; puede llevar una cobija y almohada para estar más cómodo; reclinar el asiento del coche sin importunar al de atrás e incluso, llevar a su perro sin que nadie se moleste. Al mismo tiempo, disfrutar de ver una película acompañado por una colectividad; algo que es una parte intrínseca de la experiencia fílmica.

Sin embargo, también hay límites. Está prohibido ingresar con bebidas alcohólicas al predio ni organizar raves y orgías dentro de tu coche. Tampoco está permitido llevar alimentos, pues éstos sólo los venden en la cafetería del sitio. Si uno prefiere no bajarse del auto, basta prender la luz interna del coche para que un mesero pase a tomar la orden.

El autocinema Coyote tiene dos sucursales: la del Lago Zúrich 200en la colonia Granada enfrente de Plaza Carso y la de Av. Insurgentes Sur 1729 en la Guadalupe Inna la altura del Teatro Insurgentes. Ambas abren de miércoles a domingo. Puedes checar la cartelera de películas en su página web o en sus redes sociales. Los boletos están a la venta  directamente en la taquilla del autocinema, en taquillas alternas o con anticipación en la página web.

El costo del boleto por auto es de 290 pesos, moto 100 y peatón 50. Hay unas sillas Acapulco al frente de los autos para los peatones donde te puedes sentar cómodamente a ver la película.

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