Save a Dane es un albergue de perros gran danés “rescatados del inframundo”; así lo explica Mónica, una de las cuatro mujeres que llevan este albergue. Mónica, Aline, Rosa y Helena son amigas y tienen aproximadamente 10 perros repartidos en sus casas, aunque cuando es necesario llegan a pagar pensión. El compromiso con la causa es tan grande que Mónica dejó su departamento para tener más espacio en una casa. Y es que los gran danés son un caso muy particular, porque muchísima gente los abandona o los mata de hambre cuando se dan cuenta de su tamaño adulto.
Desde hace 30 años, Mónica recorre la ciudad con dos gran danés y ahora la gente la ubica como un ícono; no es fácil pasar desapercibida con dos perros de 1 metro y de 50 kilos. Hace dos años comenzó el albergue de daneses porque llegaron a sus manos una hembra maltratada con 6 cachorritos.
Desde entonces, cada mes dan en adopción entre 8 y 10 perros. Las cifras hablan por sí mismas y nos dan una idea de la cantidad de daneses que están en situación de abuso.
Los criadores de traspatio reproducen a las hembras gran danes una y otra vez. Y después de explotarlas hasta la agonía las intercambian en Facebook por un costal de croquetas. Es ahí cuando actúa esta Asociación Civil. La encargadas recogen a estos perros que casi siempre están al borde de la muerte. Antes ellas mismas iban a recoger a los daneses, pero después de estar en situaciones de mucho riesgo decidieron tomar otras medidas.
Consideraciones para tener un gran danés
Los daneses tienen un carácter muy noble, son perros muy tranquilos y casi infantiles. Si uno adopta uno en Save a dane, primero evalúan el lugar donde vivirá la mascota y el tipo de persona que quiere adoptarlo. Lo entregan esterilizado y desparasitado. Save a dane asegura que la mejor manera de no contribuir a esta red de abuso es no comprar perros daneses sino adoptarlos.
Si saben de alguien que podría adoptar un gran danés, pásenle esta nota 🙂
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