Aprovechamos diciembre, la temporada de regalos, para recrear un tutorial de papeles marmoleados para acompañar tus obsequios con una envoltura o tarjeta hecha a mano. Usando acrílico y esmalte de uñas te mostramos cómo lograr esta textura en sencillos pasos.
El marmoleado de papel es una técnica que se extiende entre diferentes culturas desde hace miles de años. Se cree que esta técnica es de origen chino y que llegó a Japón en el siglo XII en donde recibió el nombre de suminagashi (墨流し) –que puede traducirse como “tinta flotante”.
Existen dos relatos sobre el origen de esta técnica: el profesor Richard J. Wolfe, autor de ‘Marbled Paper: Its History, Techniques and Patterns’, señala que un calígrafo, al lavar su cálamo en agua, se dio cuenta que se formaba una textura en la superficie por lo que decidió colocar un papel. La segunda versión proviene de la familia Hiroba: Jiyemon Hiroba, recibió el secreto de la fabricación del suminagashi directamente del dios Kasuga en un santuario de Nara.
Ebrú es el nombre que se le da a la técnica turca de papel marmoleado. Los primeros ejemplares de ebrú fueron encontrados en el Palacio de Topkapi en Estambul y datan de 1539. No obstante, el detalle y precisión de estos trabajos sugieren que el ebrú se encontraba presente en el Imperio Otomano desde tiempo atrás. Debido a que esta técnica se transmite mediante la oralidad de maestro a aprendiz se requieren mínimo dos años para conocer los elementos básicos de la técnica. El ebrú es considerado patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la UNESCO desde 2014.
Por mucho tiempo estas técnicas eran casi un secreto y eran muy pocos los artesanos que sabían crear este tipo de papeles. Fue hasta 1853 que se empezaron a publicar libros que describían estas técnicas y así se difundieron a un público más grande.
Con esmalte, materiales:
| Esmaltes de uñas. *Es importante es que no sean muy viejos, deben estar lo suficientemente líquidos. | Papel de diferentes tamaños. *Papeles gruesos que puedan sumergirse en agua sin que se deshagan. |
| Agua | Palillos de madera o agujas |
| Recipientes | Servilletas |
1 – En un recipiente vacía el agua y coloca algunas gotas de esmalte. Deja que se expanda en la superficie. *Nosotras usamos un recipiente pequeño por lo que aproximadamente vertimos 100ml. Si colocas mucho esmalte es probable que se hunda, trata de colocarlo lentamente.
2 – Con un palillo o aguja puedes mezclar los colores. *Haz esto muy rápido, pues el esmalte tiende a secarse en la superficie y no se adhiere al papel.
3 – Coloca lentamente el papel sobre la mezcla y una vez que se haya adherido el color, sácalo del agua y colócalo sobre una servilleta.
4 – Deja secar por algunas horas. *Esto depende del tipo de papel que uses, en nuestro caso lo dejamos aproximadamente 6 horas.
Usando esmaltes, también puedes pintar velas, cerámica y cristal. Recuerda que debes trabajar en un área ventilada debido al uso de esmaltes.
Con acrílico, materiales:
| Pinturas acrílicas | Papel de diferentes tamaños *Papeles gruesos que puedan sumergirse en agua sin que se deshagan. |
| Agua | 1 cucharada de maicena |
| Recipientes y palillos de madera o agujas | Servilletas |
1 – Lo primero es preparar el agua: Mezclamos una cucharada de maicena en aproximadamente medio litro de agua. Debes asegurarte de que se disuelva por completo, puedes usar agua caliente para conseguirlo y esperar a que se enfríe.
2 – Para diluir un poco la pintura y que no se hunda, en recipientes separados mézclalas con un poco del agua con maicena. Debes obtener una mezcla líquida pero no muy diluida, de lo contrario la pintura puede disolverse por completo en el agua.
3 – Coloca el resto del agua con maicena en el recipiente grande donde iría el papel, y coloca algunas gotas de las pinturas preparadas.
4 – Con un palillo o aguja puedes mover la pintura para crear el diseño que desees.
5 – Coloca lentamente el papel sobre la pintura y una vez que se haya adherido el color, remuévelo y déjalo secar sobre una servilleta.
