Al igual que antes en esta ciudad se salía al mercado con una canasta para cargar las compras, que casi todas se hacían en puestos de venta granel, hoy estamos –tenemos que– regresando a ello, porque los problemas ambientales son inminentes. Reducir la basura que generamos es una de las pocas cosas que tenemos en las manos para generar un cambio. Por fortuna están abriendo varias tiendas de venta a granel (además de los mercados) donde uno lleva sus propios envases de vidrio y compra sólo lo que está seguro que va a consumir. Hay muchas maneras de reducir la huella de carbono que dejamos en el planeta y esta es una de las más eficientes. Hemos comenzado con una guía práctica para reducir nuestra basura con los recursos que tenemos en la ciudad.

Beneficios de comprar a granel:

1.  Reducción de residuos

Para cuando el producto que se venderá a granel llega a la tienda, ya se han evitado muchos residuos, desde el empaque hasta el embalaje para su distribución. Ya no se diga el plástico y los residuos que uno evita en casa, que muchas veces –por más que uno quiera reusar– terminan en la basura.

2. Reducción de emisiones

Muchas veces no tomamos en cuenta la preproducción del producto, pero esta implica varios viajes. Cuando un producto va envasado, el proceso suele ser así: productor – envasador – distribuidor – tienda. Cuando compramos a granel, generalmente, el producto va así: productor – distribuidor – tienda. Ahí se ahorran al menos dos viajes.

3. Apoyo a productores y negocios locales

En el nivel más básico, cuando compras local, más dinero se queda en la comunidad. Alguna vez publicamos en el sitio las 7 razones para comprar local, que incluyen la activación de la economía local, el beneficio al medio ambiente, la diversidad de productos, entre otras. Todo esto implica comprar a granel.

4. Compras la cantidad que necesitas

Esto está relacionado directamente con reducir el desperdicio de materia. Uno aprende a medir las necesidades propias y esto resulta en una relación distinta con los alimentos y los objetos.

5. Comes más sano

Lo más importante de comprar a granel es reducir la huella de carbono. Sin embargo, algunas cosas vienen por añadidura. Como comer más sano y más variado. En estos lugares que cuidan cada aspecto, encuentras ingredientes raros, que poco se encuentran en el mercado, mucho menos en el supermercado.

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Tres lugares de venta a granel en la Ciudad de México:

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1. Botánica Granel

a granel

Este lugar en la Condesa es especial por su oferta, que es vastísima: tan sólo de arroz tienen seis opciones o más de 50 especias distintas. Tienen aceite de oliva, de ajonjolí, girasol. La avena de Jalisco es la preferida. Para navidad, por ejemplo, traen polvo de camarón o mole de Milpa Alta. Y poco a poco traen más productos que la colonia pide, por ejemplo, lenteja negra o lenteja rosa o la melaza (miel de piloncillo) mexicana, que iba a ser temporal pero se quedó por petición de los clientes. Lo primordial para Botánica Granel es no hacer basura: por ello todos sus esfuerzos están –además de la calidad– en la procedencia, que entre más cerca mejor, pues menos desplazamiento es menos basura. Recientemente comenzaron a recibir donaciones de bolsas de plástico buenas para reusarlas.

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2. Estado Natural

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Estado Natural abrió en octubre del año pasado. Tienen algunos productos de temporada o más raros, por ejemplo la harina de mezquite, con la que puedes hacer hot cakes sanos, pues es dulce y tiene índice lucémico bajo; coco rayado natural que viene de Acapulco. La miel a veces llega de girasol, a veces de mezquite u otras flores. Mole de Milpa Alta y una granola que hace una chica de Cuernavaca, que es de los favoritos. Si llevas tu envase de vidrio o bolsa reciclable (de algodón, por ejemplo) te dan el 5% de descuento. Además, tienen tienda en línea y envían a todo el país, de forma totalmente sustentable.

Recomendamos ver sus redes sociales, donde comparten recetas, productos de temporada o consejos para reducir la huella de carbono de la manera más ligera.

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3. La Nature

a granel

En La Nature venden sobre todo productos lácteos, de granja. Todo es de libre pastoreo y orgánico y lo mejor es que son sin temor a exagerar, extraordinariamente ricos. Hay huevos, quesos de Zacatlán de las Manzanas, leche y crema fresca del Ajusco, leche y queso de cabra de Chiumalhuacán, yogurt natural o yogurt con compotas que ellos hacen y son una delicia, granos, raíces y especias, opciones veganas y productos caseros como salsas, ratatouille, ragú o pan de masa madre. También tienen productos de higiene personal: shampoo y jabón a granel, cotton pads reutilizables, toallas femeninas de algodón, pasta de dientes, crema casera. La primera vez pagas un poco mas por el envase pero cuando vuelves con él, te reembolsan $10 o $15 pesos, dependiendo del tamaño.

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