En la cartelera del Foro Lucerna ahorita está Dirt! (mugre), una obra ecuménica pero cortita que atenta contra el ruido, es honesta y detallista. Cada tela del vestuario, cada hilo o foco del escenario está puesto con cuidado y dice algo. Gaby Muñoz (aka Chula The Clown) es la directora, autora y (única) actriz de este monólogo sin palabras –absurdo y profundo como la figura misma del payaso– y es una de las mejores cosas que verán (estamos seguros) este año.
Sin ahogar la obra en comentario (para que la vayan a ver), creemos que lo más estimulante de Dirt! está en el motivo (colores, texturas, formas casi victorianas pero envueltas en nube) y en la discreción. El diseño de vestuario (Valentina Muñoz y Alejandra Quesada) funciona como pequeños personajes que se añaden a la actriz para representar apegos, fantasmas, vanidades o inseguridades. Esto se conjuga con la escenografía, que es generosa y hábil donde las haya.
Usando todo esto y algunas risas o interjecciones, Gaby comunica una idea clara: soltar. Soltar el pasado, las cosas, las máscaras para sentirse, al fin, limpia.
Durante toda la obra van cayendo pequeñas iluminaciones y uno se va “limpiando” junto al personaje. En un momentito ya se es cómplice de la narrativa, ríe de palabras mudas y se identifica con gestos y bromas. Todo es exuberante y dulce en el mismo lugar.
Decía Clarice Lispector que “elegir la propia máscara es el primer gesto voluntario humano. Y es solitario”. Esto también lo transmite Dirt! de una manera sumamente estética (y entonces humana). La recomendamos mucho.
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