Casa Lu está a pocas cuadras del empedrado y antiguo centro de Tlalpan. Es un espacio tranquilo, como una casa de campo en la ciudad, que invita a escritores y artistas de México u otra ciudad del mundo a que se alojen una temporada y trabajen y se inspiren y vivan y expongan su trabajo. La anfitriona de esta preciosa casa es Lupe Quesada, quien también es escultora y creció a pocas casas de ahí.
La casa fue remodelada pero conserva un aire campesino; tiene tres dormitorios donde caben hasta cuatro personas, cocina, sala de estar, tres baños, una galería, dos estudios de interior y tres patios donde los artistas pueden trabajar. En el jardín hay cuatro labradores, una pérgola, la sombra rayada de la pérgola cuando sale el sol, un huerto, mucho pasto y árboles frutales de aguacate, durazno, limón… Es el delirio de un capitalino cansado. Casa Lu es un remanso en el caudal citadino.
Esta es de las pocas residencias de artistas –si no es que la única– particulares en el país. Es decir, para entrar al programa el artista o escritor paga su estancia, y aunque sí hay un proceso de selección, esto hace a Casa Lu un espacio más abierto a nuevas propuestas y a tener una mezcla entre artistas emergentes y consolidados. La convocatoria para el programa de residencias se encuentra abierta a lo largo del año, y la estancia mínima es de 1 mes y la máxima es de 6 meses. Los artistas tienen que pagar una cuota que cubre el costo de alojamiento, estudio, transporte al aeropuerto o terminal de autobuses y una exposición final en la galería o jardín con una recepción.
Casa Lu es un lugar de paso en el mejor de los sentidos. En tibetano, la palabra para el cuerpo es lu, que significa “algo que dejas atrás'” como el equipaje.
‘Lu’ recuerda que sólo somos viajeros refugiados temporalmente en esta vida y en este cuerpo. Casa Lu es un espacio en el que los artistas pueden vivir, trabajar e intercambiar de manera temporal para luego continuar con su viaje en algún otro lugar. Esto responde al deseo de Lupe Quesada por empezar este proyecto: “espero poder recibir a artistas viajeros de todo el mundo y darles una buena experiencia creativa y cultural en mi ciudad natal”.
En Casa Lu los residentes tienen la sensación de estar fuera de la urbe mientras están ella, cerca de la escena artística de la ciudad.
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