En el sur de la ciudad vive la comadreja cola larga. Mustela frenata es el nombre científico de esta especie de mamífero mustélido distribuido en tantos lugares como largo es nuestro continente; uno puede encontrar a la comadreja cola larga desde Canadá hasta Bolivia, pasando por nuestro país. En la Ciudad de México, la comadreja habita el sur de la mancha urbana: Pedregal, Cuemanco, Milpa Alta, el Parque Nacional Cumbres del Ajusco y el Área de Protección de Flora y Fauna Corredor Biológico Chichinautizin.
Aunque su cara de despiste tierno sugiera lo contrario, la comadreja cola larga no es un animal sociable. Machos y hembras viven separados excepto en época de apareamiento y son muy agresivos con los intrusos y los extraños, así que si alguien ve una entre el paisaje sureño, es mejor seguir de largo.
La comadreja cola larga tienen un cuerpo delgado y muy alargado. Su cola es larga, tupida y representa casi la mitad del largo total de su cuerpo peludo, que es color canela en la espalda y blanco con motas amarillas en el vientre. La cabeza es pequeñita y angosta con largos bigotes y las patas cortas. Son muy buenas nadadoras y trepadoras, y aunque casi siempre están más activas durante la noche, también sales a veces en el día.
Generalmente, esta especie de comadrejas es respetada por los pobladores porque son un gran control de plagas. Se alimentan de pequeños roedores, reptiles, aves y a veces crías de conejos. También comen algunas frutas durante el verano. Si alguno encuentra una comadreja cola larga en su camino, lo mejor es observar sus largas colas peludas a lo lejos y dejarlas tranquilas. Son parte de nuestra fauna local e importantes para el equilibrio de esta ciudad, ya de por sí caótica, y que no necesita más intervenciones.
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