Entre el 17 de junio y el 1 de agosto de 1968, con motivo de las Olimpiadas, pasó algo extraordinario en la Ciudad de México: la “Reunión Internacional de Escultores”. Allí Goeritz le propuso al presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos, el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, tener eventos culturales como parte de las fiestas, al igual que hacían los griegos durante los Juegos Olímpicos de la Antigüedad.
En el acto inaugural del Encuentro internacional de escultores, Goeritz expuso lo siguiente:
El entorno del hombre moderno se ha ido haciendo cada vez más caótico. El crecimiento de la población, la socialización de la vida y el avance tecnológico han creado una atmósfera de confusión. La fealdad de muchos elementos indispensables y de la publicidad en general desfiguran las comunidades urbanas, particularmente en los suburbios y en las carreteras; lo último, en este siglo de tiempos acelerados y del automóvil, ha adquirido un significado sin precedentes. Como consecuencia, hay una urgente necesidad de diseño artístico enfocado a la ciudad contemporánea y a la planeación de vías públicas. El artista, en vez de ser invitado a colaborar con los urbanistas, arquitectos e ingenieros, se queda a un lado y produce sólo para una minoría que visita las galerías de arte y los museos. Un arte integrado desde el inicio del plan urbano es de gran importancia en la actualidad. Esto significa que la obra artística se alejará del entorno del arte para el bien del arte y establecerá contacto con las masas a través de la planeación total.
Las esculturas solo tenían 3 requerimientos: cada una debía tener un diseño abstracto, escala monumental y utilizar el concreto como material principal de construcción. Tenían que estar pensadas para verse desde un automóvil a 70 km por hora, sin detenerse. Los espectadores irían al volante o viendo por la ventana en movimiento.
Este es un homenaje a esas esculturas (algunas ya en el olvido), y hasta abajo la lista de todos los artistas.
19 esculturas para ver
desde un auto en movimiento:
Estación 1
Señales (México), autor: Ángela Gurría.
Estación 2
El ancla (Suiza), autor: Willy Guttman.
Estación 3
Las tres gracias (Checoslovaquia), autor: Miloslav Chlupac.
Estación 4
Sol (Japón), autor: Kiyoshi Takahashi.
Estación 5
El sol bípedo (Hungría), autor: Pierre Szekely.
Estación 6
La torre de los vientos (Uruguay), autor: Gonzalo Fonseca.
Estación 7
Hombre de paz (Italia), autor: Constantino Nivola.
Estación 8
Disco solar (Bélgica), autor: Jacques Moeschal.
Estación 9
Disco mágico (Estados Unidos), autor: Todd Williams.
Estación 10
Reloj solar (Polonia), autor: Grzegorz Kowalski.
Estación 11
México (España), autor: Josep Maria Subirachs.
Estación 12
Janus (Australia), autor: Clement Meadmore.
Estación 13
Muro articulado (Austria – E.U.A), autor: Herbert Bayer.
Estación 14
Tertulia de gigantes (Países Bajos), autor: Joop J. Beljon.
Estación 15
Puerta de paz (Israel), autor: Itzhak Danziger.
Estación 16
Matilde (Francia), autor: Olivier Seguin.
Estación 17
Charamusca africana (Marruecos), autor: Moahamed Melehi.
Estación 18
Puertas al viento (México), autor: Helen Escobedo.
Estación 19
Sin título (México), autor: Jorge Dubon.
Invitados
Invitado 1 El Sol Rojo, Alexander Calder, Estados Unidos.
Invitado 2 La Osa Mayor, Mathias Goeritz, México.
Invitado 3 Hombre Corriendo, Germán Cueto, México.