En esta ciudad de micro-climas quizá no nos queda más que entregarnos a la imprecisión. Durante el día podemos tener tres climas distintos o bien, sin esperarlo, ser parte de las heladas que vienen del norte. Esta semana entró el frente frío 23 y por alguna razón esto siempre nos toma desprevenidos. Nunca estamos preparados.
Todos sabemos que el frío en esta ciudad es, invariablemente, muy frío a la sombra y cálido al sol. Pasamos mucho tiempo en oficinas, cubículos o departamentos con poca luz, pero al menos tenemos la fortuna de tener bosques, parques u otros rincones afortunados donde de pronto se asoman unos cuantos rayos de sol. Además, la vitamina D es la vitamina del sol que, entre otras cosas, refuerza defensas y ayuda a aliviar los malestares. Dejamos cinco espacios en la ciudad para darte baños de sol y sobrevivir al frío.
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1. Totem del Bosque de Chapultepec
Calz. del Río, Panteón Civíl de Dolores, Bosque de Chapultepec.
Cuando se trata de planes al aire libre, el Bosque de Chapultepec es una buena referencia. A diferencia de otras zonas más arboladas del bosque, donde es más conveniente pasar una tarde de verano, esta zona es de las más despejadas. Además qué mejor que la vista sea el colorido tótem de 11 metros de altura que Canadá alguna vez regaló a México.
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2. El claustro del Museo Franz Mayer
Hidalgo 45, Guerrero.
El claustro del Museo Franz Mayer rodea un patio interior privilegiado por el sol. En este pedazo del Centro Histórico, uno puede sentarse ya sea en la banca o alrededor de la fuente para encontrar –siempre– el alivio de los rayos de sol.
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3. Zona de niños del Parque España
Parque España, Condesa.
En la zona de niños del Parque España hay una banca que está siempre sola y especialmente soleada. Una invitación a recargar energía y para que quienes trabajan por la zona se tomen un tiempo y vuelvan al trabajo con mejor ánimo.
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4. Islas de Ciudad Universitaria
Av Cd Universitaria 3000, CU.
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5. Trajineras
Xochimilco.
Para plan de fin de semana soleado siempre está Xochimilco. Sí es posible tener un día tranquilo en las trajineras, todo depende de la hora y embarcadero. Este otro micro-ecosistema de la ciudad, más húmedo, es ideal para recobrar fuerzas para la semana.
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