Aunque existen elementos comunes entre los rituales en torno a la celebración del Día de Muertos en nuestro país, cada región y pueblo tiene una forma particular y única de hacerlo. En la Ciudad de México, se encuentra Mixquic, uno de los trece pueblos de Tláhuac en donde la celebración del Día de Muertos es parte fundamental de la vida del pueblo.
El nombre de Mixquic tiene orígenes náhuatl, se dice que significa ‘mezquital’ o ‘en el mezquite’, pero algunos investigadores han propuesto que Mixquic proviene del náhuatl Miquixtly que significa ‘muerte’, lo cual se relaciona directamente con la importancia del Día de Muertos en esta localidad.
Desde la tiempos prehispánicos, Mixquic se caracterizó por ser una importante región agrícola. Historiadores señalan que su fundación como señorío independiente con su propio gobierno fue alrededor de los años 1150-1168. Al estar localizada en un territorio privilegiado y por su gran producción agrícola, Mixquic fue sometido por el pueblo mexica en 1433.
Hernán Cortés y sus tropas pasaron la noche aquí en 1519, pero fue hasta 1533 que la orden de los agustinos llegaron a Mixquic y comenzaron la edificación dedicado a San Andrés Apóstol, convirtiéndose en el santo patrono del pueblo. De este templo construido por el pueblo de Mixquic hoy sólo quedan la torre, el campanario y la capilla abierta, pues debido a sismos y la humedad de la zona, se han ido derrumbando.
Actualmente existen 4 barrios originarios en Mixquic: San Miguel, San Agustín, San Bartolomé y Los Reyes. Esta división se mantienen desde la época virreinal y cada uno es identificado por una cruz de piedra. De acuerdo con una investigación de la antropóloga Yurema Echeverría, los habitantes del pueblo mencionan que: “Las cruces por fuera son de piedra, pero por dentro son rellenadas con huesos que se encuentra la misma gente cuando van a construir sus casas, cuando excavan se encuentran con muchos huesos, de aquel tiempo, de los indígenas que vivían aquí antes de que vinieran a conquistarnos”.
En las calles y barrios de Mixquic, este pueblo de origen prehispánico, la fiesta de Día de Muertos es una de las más importantes del calendario. Las preparaciones empiezan desde meses antes cuando comienza la siembra de flores de cempasúchil.
En la entrada del pueblo, en el camino que viene de Tetelco, se encuentra sobre la Calle Independencia, justo en el Barrio de San Miguel, un pequeño tianguis de comida típica y quesadillas, sobre todo de flor de calabaza y huitlacoche recién cosechado en la chinampa, la cual se puede admirar desde ahí. De los platillos típicos de la región, como el mixmole, elaborado con mole, charales y nopales, exquisita herencia de la gastronomía prehispánica.
El 29 de julio de 2011 la oficina de Turismo del gobierno capitalino declaró a Mixquic como Pueblo Mágico, debido a la intención que había de darle promoción turística y convertirlo en destino turístico y dejara de serlo solamente el 1 y 2 de noviembre; sin embargo, estos planes no se consumaron, y al concluir la administración de ese sexenio el programa de Pueblos Mágicos desapareció.